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  • LA DEHESA ES SABIA

    CAMPO CHARRO, CAMPO NUESTRO

    Perpetuo. Imponente. Encinas aquí, robles allá, pastos eternos más allá. Hoy, dorado. Mañana, esmeralda. Blanco e impenetrable con la llegada de las nieves. Abruptamente interrumpido por las cimas de su horizonte, salpicado de pequeñas lagunas, arroyos y ermitas. Sol y sombra. Hogar. Tradición. Sustento. Equilibrio. Así es nuestro Campo Charro. Inolvidable y siempre sorprendente

LA DEHESA ES RESPETUOSA

Entre octubre y febrero la dehesa comparte los frutos de sus árboles con las piaras de cerdos ibéricos que rondan libre y felizmente por sus llanuras. Las bellotas que caen de las encinas, los alcornoques y quejigos, en otoño abundan de hidratos de carbono que engordan a los animales y se transforman en ácido oleico, que se infiltra en su masa muscular, dándoles ese sabor y jugosidad característicos, que solamente se encuentran en los productos derivados del cerdo ibérico.

LA DEHESA ES SOSTENIBLE

Consumen una media diaria de 10 kg de bellotas y 2 kg de hierba. Los cerdos pueden iniciar el tiempo de " la montanera ” pesando 90 kg y finalizando con 160 kg.

El modelo de desarrollo del oeste peninsular, la dehesa Salmantina y Extremeña, presenta un equilibrio sostenible y natural único en el mundo.